Evaluación del deslizamiento de suelos en San Pedro de Cumbaza. Región San Martín, provincia San Martín, distrito San Antonio

Abstract

El presente informe técnico es el resultado de la evaluación de la reactivación del deslizamiento de suelos acontecido el 02 de junio del 2020. Dicho evento se localiza a 700 m al suroeste del área urbana de la localidad de San Pedro de Cumbaza, perteneciente al distrito de San Antonio, provincia y región de San Martín. Con este trabajo, el Instituto Geológico Minero y Metalúrgico (INGEMMET), cumple con una de sus funciones que consiste en brindar asistencia técnica de calidad e información actualizada, confiable, oportuna y accesible en geología y peligros geológicos. El objetivo del informe es evaluar la fenomenología del deslizamiento de suelos, determinar su magnitud (área y volumen deslizado) y el nivel de peligrosidad que representa para la infraestructura urbana, vial y seguridad física de la población de la localidad de San Pedro de Cumbaza. La geología está marcada por la presencia de depósitos cuaternarios deluviales de composición arcillosa, que cubren el basamento rocoso de lutitas y margas de elevado grado de alteración y fracturamiento. Estas rocas corresponden a la Formación Chonta. La configuración morfológica está dominada por montañas y colinas estructurales en roca sedimentaria. El evento corresponde a la reactivación de un deslizamiento acontecido el día 14 de abril del 2020 a las 11.00 am, como consecuencia de las lluvias, en una ladera ubicada a 700 m al suroeste de la localidad de San Pedro de Cumbaza. Dicho movimiento en masa se activó el 02 de junio del 2020, en horas de la madrugada, constatándose por la mañana que una gran masa de suelos se había deslizado ladera abajo, obturando el cauce de la quebrada Trancayacu, dando origen a un estancamiento de agua. La masa deslizada muestra una amplitud promedio de 150 m, una longitud de 330 m, ocupa un área de 47,263 𝑚2 equivalente a 4.73 ha e involucra un volumen de aproximadamente 180,000 𝑚3. El embalse formado por la obturación de la quebrada Trancayacu abarca un espejo de agua de 460 𝑚2, una profundidad de 1.50 m, conteniendo un volumen aproximado de agua de 690 𝑚3. Este volumen de agua se encuentra drenando lentamente a través de maleza y de los escombros de suelos y rocas, pero es necesario su desembalse mediante la apertura de una zanja de drenaje. Puede calificarse como un deslizamiento activo, progresivo, tipo traslacional, puesto que el plano de deslizamiento se alinea al plano de estratificación del basamento rocoso, siendo el contacto entre este y depósitos deluviales la superficie de movimiento.